Ruth Montes es una madrileña de 40 años, mamá de una maravillosa niña y esposa de un fantástico peruano, cuyo recorrido profesional ha estado siempre vinculado al marketing y la comunicación de moda de lujo. Ha trabajado con importantes firmas internacionales, como Carmen Esteffens, Woman’Secret y Joyería Majorica.
En diciembre de 2016 se mudó a Lima junto a su familia y en febrero de este año inauguró El Mundo de Aless, importando desde España ropa y calzado para niños, entregando calidad y diseño en una experiencia de compra distinta a precios accesibles. “La recepción ha sido fantástica, tan fantástica que estamos abriendo un showroom serio para recibir a nuestras clientas”, afirma.
Su pequeña, Aless, es la que da nombre a la microempresa, “la cosa más importante del mundo, mi hija. Porque este mundo es suyo, no mío”. Al llevarla al nido vio la oportunidad de negocio, primero alguna madre que se acercaba a preguntarle sobre los zapatos de Aless, luego otra sobre el vestido, hasta que luego de 2 semanas había un grupo de madres esperando a ver qué llevaba.
“Me di cuenta de que había un nicho bastante desatendido en el sector infantil, pues un porcentaje muy alto de mamás no podían acceder a una moda internacional de calidad y de diseño para niños”, señala. Decidió comenzar su microempresa dirigida por dos cualidades innegociables: importar siempre made in España y que una mamá en Perú pague el mismo precio que una mamá española paga por esa misma prenda en España.
Prohibido usar un vestido sólo dos veces
El showroom de El Mundo de Aless ofrece un servicio personalizado. Las clientas son recibidas bajo cita, cuentan con estacionamiento de cortesía, café y, lo más importante, asesoría: “preguntamos cómo es la niña, la circunstancia en la que va a utilizar esa ropa y le enseñamos a combinar cada pieza, porque un vestido puede utilizarse de cincuenta formas diferentes. Está prohibido usar un vestido sólo dos veces”.
Para Ruth, un producto se tiene que optimizar de todas las maneras posibles buscando que la inversión sea razonable, sea algo productivo, aunque eso signifique vender menor para educar adecuadamente a la cliente: “Muchas veces quieren llevar 3 vestidos, 4 pantis, 5 pares de zapatos y les digo no, te vas a llevar 3 vestidos, 1 par de zapatos y 2 pantis, y te voy a enseñar a combinar todo esto. No hace falta que te gastes 1000 soles”.
Las clientas disfrutan de la experiencia y el aprendizaje, además de ahorrar, y eso las hace regresar. En su negocio, comenta la dueña de El mundo de Aless, es clave pensar no como comerciantes sino como madre y así ofrecer “la experiencia pretty woman, pero para mamás”.
Moda con un poquito de valor
Ruth había realizado un Máster en Comercio Exterior sin encontrar muy bien el lugar que ocupaba este nuevo conocimiento en su desarrollo profesional, pero que se convirtió en oro desde el momento que decidió crear su empresa. Entender las políticas de importación en nuestro país, además de encontrar los mecanismos más eficientes para cumplir a cabalidad con todos los requisitos fue una de las etapas más duras del emprendimiento. En cuanto a asegurarse de que el producto sea 100% español, pero manteniendo los precios, le llevó y sigue llevando negociaciones con cada uno de los proveedores, además de estar atenta a las tendencias y seleccionar las colecciones adecuadas. “Si tengo que viajar a Madrid por 48 horas para elegir colecciones y dormir en los aviones nocturnos, lo hago”, afirma contundentemente.
Fruto de ese trabajo arduo, El Mundo de Aless ha conseguido en apenas 9 meses contar con 5 puntos de venta en Lima, surtidos gracias al acuerdo con 3 proveedores de calzados, 6 proveedores de textil y la distribución exclusiva para Perú de la marca Cóndor Moda Infantil, que es líder del mercado de pantis y calcetería en España con más de 120 años.
Para 2018 prepara la apertura de Showroom serio, como le dice, además del ingreso a más tiendas y, en especial, la invasión a provincias. Si bien tienen clientes de tiendas en provincia que vienen a comprarle, desea fortalecer este mercado, así como incursionar en los países vecinos.
La clave de llevar adelante una microempresa, finaliza Ruth, es un poquito de valor, “aunque no tengas dinero, no tengas recursos, no tengas las herramientas, si tú te lanzas puedes conseguirlo todo. Puedes volver a empezar con 40 o con 50. Lo importante es reinventarse y tener un poquito de valor y muchas ganas”.
Ruth Montes y El mundo de Aless estarán en nuestro showroom Rise&Shine, el 30 de noviembre, 1 y 2 de diciembre en The Office Centro de Negocios, Avenida Alberto del Campo 411, Of. 1202. ¡No te lo pierdas!